42 (Adolfo R. Gorosito, 2019) – Recibí un texto que contiene “consejos para longevos”. Vamos con algunos de ellos: “Cuida tu aspecto personal; viste modestamente pero con prolijidad, como para ir a una fiesta, pues la vida es una fiesta irrepetible. // No te quedes en tu casa. Nada de jugar al preso voluntario. // Recorre las calles de tu pueblo procurando el contacto con los vecinos, sintiendo el placer que ofrece la comunicación. // Evita actitudes de viejo derrumbado. Camina con gesto distendido. // No hables de achaques. Nadie quiere oír historias de hospital. No te llames viejo // Cultiva el optimismo, sé positivo en gestos y palabras. La vejez es suma de años, pero esos años tienen que ser fecundos. Sé útil a ti mismo y a los demás. // Recuerda que cualquier actitud laboral, intelectual o artística es fuente de sensaciones inefables. Busca a tus amigos en todas las edades. ¡Alégrate de ser parte del presente!. // Emilio Novas, periodista y amigo, decía: Agreguemos vida a los años y no años a la vida. // Ser positivos y de buen ánimo no obliga a ser graciosos. La magia de la alegría emana desde la claridad interior. La Vida es una experiencia única, sin segunda parte. Agradezcamos aquellas cosas que están a nuestro alrededor con idioma universal: aromas, sonidos, el equilibrio justo de los cinco sentidos; la armonía natural de los cuatro elementos; el prodigio de los colores; la textura de la Vida; el monte, el árbol y nosotros; el perfume de la noche; la luz sobre el olvido; la música del atardecer; los mensajes ocultos; el llanto de la niebla; la sangre de la tierra; los espíritus del cielo; los contrastes, el hermoso amanecer ¡Están cerca nuestro y muchas veces no los apreciamos debidamente!”.