99 (Adolfo R. Gorosito, Agosto/septiembre 2024 – A quienes sumamos más años de vida y disponemos de un amplio panorama en la consideración del tiempo pasado, nos preocupan los datos que causan alarma y tristeza.Resulta insuficiente la herencia de buenos propósitos que dejamos a criterio de los jóvenes, y el endurecimiento de situaciones de riesgo lo demuestra. Las estadísticas indican que cada vez más jóvenes afrontan inconvenientes que les impiden completar sus estudios.Otras estadísticas nos hablan de incremento en cuanto a delitos y violencia, a tal punto que en diversos sectores de la sociedad se clama por cambios más severos en cuanto a inimputabilidad en relación a la edad del protagonista en crisis. Se calcula que los chicos que terminan la primaria han visto al menos 10.000 actos de violencia en cine y televisión. Quienes éramos niños hace varias décadas también teníamos a nuestros héroes de época. Pero eran más definidos los perfiles de esos héroes que procuraban orientar al mundo recurriendo a la violencia inevitable desde la revista de aventuras o desde el celuloide, siempre teniendo a la justicia como norte. Se habla con mayor frecuencia de la participación de adolescentes en actos de violencia y muerte, demostrativa de un claro desprecio por la vida propia y ajena. El tema invita al estudio de situación, para que sean cada vez más los menores de edad que piensen en el futuro cimentado en el estudio, el trabajo y el respeto a la sociedad, factores ineludibles que se asocian a la idea de terreno propicio para la realización individual y colectiva.