Escritores Locales DESPUÉS DE LA CIMA… ¿QUÉ? Andres07/01/2018039 views (Adolfo R. Gorosito) – Para alentar y alentarnos a continuar con nuestras ideas, trabajos, estudios o cualquier otra actividad que tiende a perfeccionarnos, solemos referirnos “a la cima”, para significar que el esfuerzo nos puede llevar a nuestro objetivo, la máxima altura si hablamos en metáfora. Pero están también quienes ponen límites a esa forma imaginativa. El gran novelista colombiano Gabriel García Márquez incluyó esta frase en una de sus obras: – “No le deseo el éxito a nadie. Le sucede a uno lo que a los alpinistas que se matan por llegar a la cima, y cuando llegan… tratan de bajar discretamente, con la mayor dignidad posible”. Esta frase puede inducir a cierta forma de desaliento, pero no es desacertada. Tal vez es por eso que los escaladores más atrevidos buscan siempre la montaña más alta, la que tiene su cima entre nubes, nieves eternas y vientos crueles, porque cuanto más arriba llegan seguramente la sensación de triunfo es mayor. Pero, claro, tras cierta breve ceremonia testimonial deben iniciar el descenso, formidable desafío que tiene sus propios e inevitables peligros. Veamos desde otro ángulo: El boxeador argentino Sergio Palma (Nacido en el Chaco en 1956, Campeón Mundial Supergallo de la AMB en 1976, Premio Konex en 1990) pese a la rudeza de esa profesión nunca abandonó su veta literaria, tras conquistar el título mundial dijo, según el periodista Cherquis Bialo, dijo lo siguiente: – “La cima es un lugar muy chico para vivir”. Se refería a su destino inmediato, es decir seguir aceptando desafíos para retener un poco más esa posición de privilegio y las posibilidades económicas que significaba. Decididamente “llegar a la cima” puede ser una hazaña deportiva o una metáfora estimulante, No desdeñemos la metáfora porque se parece mucho a “¡Plus ultra!”… es decir “¡Más allá!”, siempre saludable.