84 Desde la Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias una vez más insistimos en que el camino elegido por el Gobierno no va a lograr que los precios internos de la carne bajen sino que va a tener el efecto contrario al buscado. Ya hemos demostrado con cifras concretas que cuando en el pasado se tomó un sendero similar, los precios de la carne en el mercado interno, lejos de bajar, se incrementaron más de un 50% sobre el promedio del resto de los precios de la economía. Lo hemos dicho innumerables veces, de todas las maneras posibles: el productor no es el formador de los precios ni el causante de la inflación, sino el eslabón más débil de una cadena compleja, dinámica y muchas veces con intereses en pugna que debieran ser concertados. Por eso, repudiamos también que algunos integrantes de ésta cadena de carne vacuna, ofrezcan aumentar los derechos de exportación como parte de la solución sabiendo que eso afectara directamente el precio recibido por nosotros. No es aumentando impuestos como se solucionarán los problemas. Al incremento generalizado de precios que vivimos hoy, hay que atacarlo por sus verdaderos orígenes que tienen que ver con una economía descontrolada, con un gasto público desmedido y con una emisión de pesos que exacerba esa dinámica de los precios antes que calmarla, pero por sobre todo por las malas señales emitidas que afectan la confianza y la credibilidad del país, y postergando las inversiones que nos hacen falta. Debe entenderse que las exportaciones cerradas hoy son de un producto que no es del gusto de los argentinos, y que intentar bajar los precios saturando las carnicerías de vacas viejas, lo que producirá será un daño enorme a los productores criadores que en general son los más sufridos por estar lejos y en campos de menor calidad. En este contexto de incomprensión, la Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias convoca a continuar con el cese de comercialización de todas las categorías de hacienda vacuna en pie hasta las 24 hs del miércoles 2 de junio, momento en el que abrirá una ventana en función de los ciclos naturales, las necesidades por los compromisos asumidos por los productores, los necesarios movimientos que implican la actividad de cría y por sobre todo porque no queremos producir perjuicio alguno sobre el ya castigado ciudadano argentino por la falta de ingresos erosionada por la inflación, por la creciente preocupación por el trabajo y en medio de la pandemia con injustificados atrasos en la vacuna como solución necesaria. Continuaremos en sesión permanente para seguir evaluando el estado de situación y continuar expresando el reclamo y el enojo de productores no solo de carne vacuna, sino de otros numerosos productos de las economías regionales y de producciones extensivas e intensivas, a los cuales también afectan profundamente las señales emitidas con tan errónea medida.