Escritores Locales LAS VOCES QUERIDAS Andres02/08/2020052 views (Adolfo R. Gorosito, 2020) – Cierta vez, durante la “misa de hombres” en la Capilla Nuestra Señora de Fátima un sacerdote predicaba sobre la necesidad de honrar a Dios con la oración. Abogaba por la “oración contemplativa” aspirando al acercamiento del Hombre a la Esencia Divina, pero abstrayéndose de todos los problemas terrenales:”Debemos unirnos a Dios sin que nos distraigan los problemas terrenales”, agregó el predicador. Prefiero al Hombre que sostiene su credo y los preceptos que asume como creyente, pero abriga sentimientos generosos que emanan de su propio espíritu de solidaridad. Al decir esto me siento respaldado por cada palabra y cada acción de Jesús, cuya muerte induce a la redención universal. Busquemos respuestas a los problemas que la vida cotidiana nos opone, y así aplazaremos el egocentrismo de la estéril contemplación que se sugiere. Sin optar por la solemnidad que algún hecho dramático crea, podemos gozar del sabor agridulce de la nostalgia sana, sin dar lugar al calificativo “anemia del pasado”. Más vale apreciar la diafanidad de un claro amanecer que el optimismo hace posible. Tendamos la alfombra de nuestro sincero aprecio a las voces queridas que nos acarician, nos consuelan, nos envuelven, al ser emitidas desde la distancia con intención de abrazo. Podemos aprender a escuchar esas voces que tal vez creemos que vienen desee lejos, pero están más cerca de lo que creemos. Cuando las voces queridas llegan se refugian en nosotros y nos impulsan a la tarea programada ya no nos sentimos solos. Esas voces de familiares o amigos tienden un puente solidario hacia el precepto bíblico “Amarás al prójimo como a ti mismo”.