58 La Oficina de Bromatología de Adolfo Gonzales Chaves brinda a la población recomendaciones para prevenir las Enfermedades Transmitidas por Alimentos (ETAS). En estás pascuas y la rutina diaria, Bromatología recomienda a los vecinos y vecinas, tener en cuenta las siguientes recomendaciones para la compra, manipulación y almacenamiento de alimentos: Al momento de comprar pescados o mariscos congelados: Constatar que el envase (latas) no esté abierto, roto o golpeado en los bordes. Si se realiza la compra en un comercio alejado de su hogar (otra ciudad), es recomendable contar con una conservadora con hielo para transportar esos alimentos. -Cuando sea el momento de comprar alimentos enlatados, las latas de conservador de productos de la pesca no deben presentar abolladuras, ni estar hinchadas u oxidadas. Debe tener en cuenta los rótulos, procedencia y fecha de vencimiento. Mantener la limpieza: La limpieza constituye un paso imprescindible para lograr la inocuidad de los alimentos. Lávese bien las manos con agua y jabón antes y después de manipular pescados y mariscos crudos. Lave muy bien las tablas de cortar, los platos, los utensilios (cuchillos, tenedores, cucharas) y las superficies de trabajo con agua y detergente después de haber tomado contacto con pescados crudos. Recomendaciones para evitar una posible contaminación cruzada: 1- Lavarse las manos. Separar los pescados y mariscos crudos de aquellos alimentos listos para consumir mientras esté realizando las compras en el supermercado o el almacén; en la heladera y durante la elaboración de los alimentos en su casa. 2- Para evitar que los jugos de pescados y mariscos crudos caigan sobre otros alimentos en la heladera, colocar los mismos en recipientes cerrados o bolsas plásticas con cierre hermético. Si tuviera dos tablas para cortar, utilizar una de ellas para los pescados y mariscos crudos, y la otra para frutas y verduras frescas. En caso de disponer de una sola, lavar bien la tabla con agua caliente y detergente, entre el uso de pescados y mariscos crudos y productos listos para el consumo. 2- Cocción: Se deben cocinar completamente los alimentos que se van a consumir, para reducir el riesgo de contraer enfermedades transmitidas por éstos. Pautas a considerar para garantizar la correcta cocción de pescados y mariscos: -Cocinar el pescado completamente y observar que, tanto en la superficie como al cortarlo, presente una coloración “blanco leche opaca” y se deshaga con el tenedor. En caso de los moluscos bivalvos (mejillones enteros, almejas, cholgas, berberechos y ostras), deben cocinarse hasta que se abran, lo cual es señal de que están cocidos. Tomar la precaución de desechar los que no se hayan abierto. Finalizada la cocción, consumir lo antes posible y no dejar alimentos a temperatura ambiente. Los platos elaborados con pescado crudo (como el sushi o el sashimi) tienen mayores probabilidades de contener parásitos o bacterias que aquellos elaborados con pescado cocido. No es aconsejable su consumo por parte de las poblaciones de riesgo (niños, ancianos, mujeres embarazadas y personas inmunodeprimidas). -Mantener los alimentos a temperaturas seguras Recomendaciones: Pescado fresco (refrigerado): podrá conservarse 1 a 2 días en heladera (colocar en el sector más frío, donde la temperatura es menor o igual a 5°C). Pescado congelado: Podrá conservarse hasta 3 meses en el freezer (a temperaturas de entre -12°C y -18°C). No compre pescados ni mariscos congelados si el envase está abierto o rajado. Una vez descongelados, no vuelva a congelar el producto. No descongele el producto a temperatura ambiente. Descongele los pescados y mariscos dejándolos en la heladera durante la noche.