Interes General CON PEDIDO DE PUBLICACIÓN (CARTA ELSA LOBOS MAMÁ DE DIEGO LOBOS) Andres26/12/2017072 views Llegó otro 26, once meses de aquel día. Ya paso navidad y quedando pocos días para terminar el año, aunque, las fiestas ya son como un día más. Como muchos hago un balance de lo que vivi en estos 365 días. Hoy con la mente más abierta y el corazón mas aliviado (no del todo curado el alma aun duelen) me costó mucho sobreponerme; este año me trajo lecciones muy grandes y las tome a todas. Me hubiese gustado las cosas se dieran de distinta manera, pero como vinieron, las tube que tomar que no es lo mismo que aceptarlo (con pena, rabia, desprecio y maldiciendo) En una de ellas era mi hijo el que sufría, las quebraduras…su amputacion. Lo mío era dolor y sufrimiento de madre. Quise ser fuerte pero llego un momento en que las fuerzas me faltaron, queria estar firme pero mis piernas se debilitaban. A pesar de todo, nunca perdí la tenacidad; no me arrepiento de nada de lo que hice y dije. Jamás olvide lo que habíamos prometido: Diego tenía que ponerse de pie…era nuestro único objetivo. Y así fue, todo con el tiempo se fue dando. Sabemos que falta tiempo pero su esfuerzo es tan grande que tengo la certeza que conseguirá su objetivo nuevamente. Habrá otro viaje será a principio del próximo año. La enseñanza del día a día es lo que nos sigue manteniendo en pie…como dice Diego: uno no le da importancia a lo que tiene hasta que nos falta, una parte de nuestro cuerpo y tenemos que aprender a vivir sin eso, sobrellevarlo. Llegaremos hasta el final, podrá haber obstáculos, lo que no va a faltar son ganas de llegar, aunque sea una manera de decir…porque (al final) lo desconocemos. Se que no soy la misma de hace un año, ni hace seis meses y tampoco hace un mes. Deje muchas cosas y falte a muchas que en otros momentos siempre estuve. No me olvide de nada ni de nadie solamente hay cosas que pasaron a segundo plano. La única prioridad son mis tres hijos, verlos felices es la meta que persigo con su padre. A Dios fue mucho lo que le suplique, le pedí y rogue y lo sigo haciendolo. Soy consciente que es demaciado el peso el que lleva, últimamente veo que es al único que le pedimos todo: trabajo, salud, paz, justicia. Lo que si, una pregunta le seguiré haciendo: Por qué a mi hijo y no a mi? Tal vez nunca tenga una respuesta. Si creo que esta situación es una señal que me puso a prueba y por él soy más fuerte. Será una charla pendiente que tal vez la tengamos cuando me toque estar frente a él. Cómo siempre dije todo, esto tiene un nombre y apellido: (pendejo borracho) Hernan Elias. Es muy difícil despedir un año donde alguien dejo una marca. Lo único que deseo es que termine el 31 donde contaré las horas, minutos y segundos, cuando marquen las doce saldré a mirar el cielo, ese será mi brindis, por quien lastimo a mi hijo y dejo cicatriz, por alguien que no tubo un minuto de arrepentimiento. De esa manera brindare por aquella ley que lo protege y esa justicia que lo ampara y una familia que le cuesta aceptar la verdad o como todo creen que la plata lo puede todo y tal vez sea la batalla ganada de ellos. La vida es una calesita que da muchas vueltas, Dios ve todo y pondrá la mentira y la verdad en su lugar. Sin mezclar mi brindis alzare la copa por todo ese pueblo que nos acompañó y sigue dando fuerzas y apoyo a toda mi familia, por aquellos amigos de siempre, por los nuevos amigos, por los conocidos para que el 2018 sea un año lleno de paz, salud, amor y felicidad. Gracias mil gracias a todos. Hasta la próxima carta. Elsa Acosta de Lobos DNI 17.043.643