130 (Adolfo R. Gorosito, febrero 2016) – Máxima Zorreguieta, Reina de los Países Bajos, nació en Buenos Aires y es hija de María del Carmen Cerruti Carricart y Jorge Zorreguieta. Como miembro de la familia Carricart por línea materna existe una delgada pero real vinculación con el partido Adolfo Gonzales Chaves (aunque quede en simple anécdota), dada la trascendencia de don Domingo Carricart en la historia lugareña. Máxima contrajo matrimonio con el príncipe Guillermo Alejandro de Orange en 2002. Al abdicar la Reina Beatriz a favor de su hijo en el 2013, Máxima se convirtió en la Reina Consorte. Poseedora de rigurosa preparación en temas trascendentes, goza de general simpatía, de auténtico respeto por parte de la civilidad holandesa, y sólido prestigio internacional. Recientemente leímos un informe en portal de noticias, que por su importancia copiamos textualmente: – “SHOCK DE CONFIANZA. Máxima de Holanda estaría gestionando un préstamo a bajísimo interés, de mil millones de dólares para apoyar a María Eugenia Vidal, gobernadora de la provincia de Buenos Aires, en la realización de obras de infraestructura imprescindibles para terminar con las inundaciones. Se trabajaría en el tema con especialistas holandeses que son los mejores del mundo en esto de evitar que el agua arrase con todo. Los Países Bajos que deben su denominación, precisamente, a la topografía de aquel país europeo (con parte de su territorio por debajo del nivel del mar) eligieron un ”mix” de tecnología en pos de soluciones milenarias para proteger a 9 millones de personas que viven en riesgo permanente de inundación”. Máxima Zorreguieta Cerruti, Reina consorte de los Países Bajos obtuvo la ciudadanía neerlandesa (gentilicio oficial), pero es argentina y sus sentimientos están enraizados en su país natal. Lo demuestra con sus manifestaciones, sus visitas a la Argentina, su desempeño en el cotejo de intereses internacionales, y su preocupación por lo que aquí ocurre. La gestión que lleva a cabo en torno a probable préstamo al gobierno bonaerense lo confirma. De concretarse la histórica operación nuestra provincia estaría en condiciones de afrontar definitivamente la situación de crisis que se repite en la cuenca del río Salado en cuando a inundaciones de imprevisibles consecuencias.