AMENAZA DE FRACKING Y GASIFICACIÓN DEL CARBON EN NUESTRA REGIÓN

Construcción Social Participativa informó a ChavesDigital que tendrá lugar el día 5 de agosto la Asamblea de Concejales de la Cuenca del Claromecó a realizarse en la ciudad de Laprida, donde se dialogara sobre el fracking y gasificación del carbón en nuestra región.

Según expresa la gacetilla de prensa, el día 5 de agosto, en la ciudad de Laprida, se reúne la Asamblea de Concejales de la Cuenca del Claromecó. Esta asamblea está compuesta por concejales, exconcejales, referentes políticos, vecinos, activistas ecologistas, asociaciones civiles y organizaciones ambientalistas. El motivo es abordar nuevamente el estado en que se encuentra el trámite iniciado ante el Ministerio de la Producción de la Prov. de Buenos Aires, por la empresa Claromecó Coal Basin, Argentina, subsidiaria del Delmo Group, y otras empresas del mismo grupo o de diferente concentración empresarial, con la finalidad de explorar 600.000 hectáreas y eventualmente extraer gas en la Cuenca del Claromecó, ya sea aplicando la técnica de fracturación hidráulica (fracking) en mantos de carbón u otra técnica conocida como “Keyseam” UCG o Gasificación subterránea del carbón. Ambos métodos suponen altos riesgos para la contaminación de los acuíferos y son incompatibles con toda otra actividad que se desarrolla en nuestra provincia.

En el marco de estos problemas que nos aquejan es necesario informar con claridad a nuestros vecinos, acerca de lo que significa la radicación de “empresas” (muchas de ellas fantasmas) que tienen por objeto entrar en el “negocio” energético. Seis aspectos vamos a destacar.

1) No se está discutiendo o pensando aquí ninguna política energética para Argentina con la lógica que se utilizaba hace ochenta o cincuenta años, es decir: un proyecto gubernamental, una o dos empresas nacionales o extranjeras controladas, explotando recursos propios y procesándolos para los habitantes del país.

2) Desde que entramos en la globalización, las petroleras y otras transnacionales ya no son, aunque parezca un contrasentido, exclusivamente para extraer petróleo. Hoy son el asentamiento de una “oportunidad de negocios”, en la jerga del neolunfardo, un “lave-rap”. Se crea una maraña de activos financieros que pasan de mano en mano hasta que la burbuja se pincha y llega la crisis. Por eso mismo mientras tenemos decenas de empresas en Vaca Muerta importamos gas desde Sudáfrica o de Asia, cuando aparentemente sería más sencillo tirar un gasoducto y canalizar el gas que se ventea y quema en Patagonia. Obviamente, la lógica financiera es la que no alcanzamos a comprender. Cada barco petrolero o de gas en altamar cotiza en Bolsa.

3) Las petroleras se han multiplicado al infinito en subsidiarias y mellizas que juegan en diferentes paraísos fiscales o territorios offshore, sin que la Justicia de la mayoría de los países tenga acceso al control, porque se encuentran desprovistas de jurisdicción.

4) Ya no son, necesariamente, las propias petroleras las que perforan. Son otras muchas empresas y sus mellizas, y subsidiarias que se dedican a “servicios petroleros”. Esas operan en terreno. Perforan de seis a diez pozos como mínimo cada vez, cuya vida útil va entre cinco meses y dos años. Por tanto hay que seguir ampliando y ampliando pozos, todo el tiempo.Nosotros nos quedaremos sin agua y contaminados, mientras inversionistas anónimos que no tienen la más remota idea de dónde está Claromecó en la geografía planetaria, habrán hecho dinero de la magia y de la nada, en virtud de las fotos que las empresas hagan circular mostrando sus perforaciones.

5) Estas empresas toman contacto con la población del sitio donde perforan y emplean mano de obra temporaria, que verá afectada su salud por la contaminación. Pero antes de que los obrerostengan una crisis, la burbuja financiera del fracking o de la UCG estalló, y la empresa se esfumó.

6) El otro modo de buscar radicación local es enganchar en el negocio a algunas pymes que estaban decadentes y hacerlas responsables del desastre ambiental. También buscar inversores que compren acciones y jueguen en la burbuja, abriendo mesas de dinero y cuevas.
Mientras la danza financiera está en su apogeo, la aplicación de fracking y de UCGimplica la contaminación de los acuíferos, lo que conduce al agotamiento del recurso. Por eso se trata de un problema que atañe a todos los vecinos de la región y a todos los habitantes de la provincia, excediendo ampliamente las disputas partidarias.