24 (Adolfo R. Gorosito, noviembre/ diciembre de 2024) – La última hojita del calendario ya está a merced de la brisa de su último tiempo, y cumplirá su misión inexorable: dejar a nuestra disposición el último mes del año. Y el 2024 pasará a la historia brillante y exitosa para algunos, nublada y frustrante para otros. Pero ya quedan pocos días para reunirnos en familia o entre amigos, y brindar por otro lapso similar que resulte favorable para satisfacer nuestros sueños de salud y bienestar. Al momento de los ruegos al Creador no olvidemos a los enfermos y necesitados de esperanzas por un tiempo mejor. Pidamos con la intensidad de fe que merecen las circunstancias, por todos los pueblos del mundo que sufren las consecuencias de guerras y exterminios colosales. Tamblén por los contingentes que huyen de sus países procurando salvación. Pidamos a Dios Nuestro Señor que ilumine a los líderes de las potencias mundiales, para que de una vez por todas comprendan que los efectos del cambio climático son realidad de consecuencias imprevisibles, y es señal universal de fenómenos cuya solución está al alcance de sus manos sólo parcialmente. Tal vez sea propicia la advocación de la Inmaculada Concepción, patrona espiritual de Adolfo Gonzales Chaves (Domingo 8 de Diciembre) en acercamiento real y saludable.