30 (Adolfo R. Gorosito, diciembre 2017) – Hace algunos días se conmemoró el “Día de la Soberanía Nacional”, en referencia al Combate de Obligado. Alguien comentó que ciertos hechos demuestran fisuras en la defensa de la soberanía territorial. Entonces me aventuré mentalmente en el espacio de las comparaciones, teniendo en cuenta los contrastes (trascendentes o no) que forman parte del complejo desarrollo de los acontecimientos. Pienso en la paciencia del pescador deportivo, que por enriquecer su experiencia soporta jornadas de frío, lluvia y viento junto al arroyo. Al mismo tiempo pienso en la pérdida del submarino “ARA San Juan” y sus 44 tripulantes, compatriotas en plenitud de vida dedicados en la Armada Argentina a su perfección profesional, pero en lamentable inferioridad de condiciones técnicas y operativas, según trasciende de fuentes periodísticas Pienso en las expectativas ante el anuncio de reformas en áreas del Gobierno Nacional, y los signos de resistencia de parte de sectores gremiales, agitando estandartes de defensa de los que menos tienen. Simultáneamente se informa desde Marruecos que 15 personas murieron en una avalancha, al disputarse paquetes de comida que alcanzaba cierta organización solidaria, algo que resulta difícil de entender desee un país potencialmente rico pero lejano. Pienso en los sacrificios que experimentan las multitudes para colmar tribunas en los estadios, mientras los barrabravas especulan, acechan y roban en los alrededores. En el desplazamiento de miles y miles de argentinos hacia y desde centros turísticos, mientras a la mayoría nos atosigan los efectos de la inflación generalizada pese a los proclamados controles. Pienso en tantos contrasentidos que podemos registrar a cada instante y que reflejan la complejidad del arte de vivir, que la misma Humanidad hace más difícil. Viene a mi mente el tradicional saludo callejero “¿Qué tal, che? ¿Todo bien?”. A veces no se encuentra la respuesta adecuada, porque puede ser que el amigo que así saluda conoce mucho de éstos y otros contrastes, pero el criterio personal le ayuda a superarlos.
