84 (ADOLFO R. GOROSITO, SEPTIEMBRE 2023) – La primavera se convierte en tendencia, con intención optimista para la mayoría. En invierno abundan los motivos de aislamiento y meditación. Las condiciones climáticas invitan o impelen al abrigo del hogar. Nada de esto se vincula con la trillada frase de alto contenido político: “¡Hay que pasar el invierno!”. Aunque encontraríamos abundante material estadístico si quisiéramos señalar deficiencias. Ha crecido mucho el sector de pobreza extrema en la población argentina, pero un estudio pormenorizado de la situación económica nos encaminaría hacia la desigualdad en el reparto de retribuciones. Sumamos aproximadamente 47 millones de habitantes, según datos no definitivos del censo nacional más reciente. Podemos calcular que por lo menos tres millones de personas pueden animar cada fin de semana largo o feriado estratégico para colmar capacidades hoteleras o dar vida a los escenarios vacacionales preferidos, mientras el resto debe restringirse en sus preferencias o abstenerse sin más opciones. Ejemplo de actualidad: En un mismo programa de noticias se hablaba de contrataciones en el ámbito del futbol profesional y en cifras millonarias; también se daban detalles en cuanto a la tarea incansable de colaboradores en comedores populares de la parroquia de San Cayetano, para aliviar la situación de los indigentes que duermen en las calles de Buenos Aires. ¡Pese a todo seamos optimistas en primavera!.
