4 Boca Juniors es uno de los clubes más grandes y populares de Argentina, y su recorrido en el fútbol local está marcado por los grandes nombres que dejaron su huella. En sus más de 100 años de existencia, muchos futbolistas han tenido el privilegio de vestir la camiseta xeneize, aunque solo unos pocos han logrado inscribirse en la historia grande del club. Al revisar la lista de los máximos goleadores de Boca, aparece un nombre que, aunque menos conocido por las nuevas generaciones, resulta fundamental cuando se repasan los logros del club: Jaime Sarlanga. Con 129 goles, ocupa un lugar privilegiado entre los grandes artilleros de la institución y su legado continúa siendo un punto de referencia al día de hoy. ¿Quiénes han sido los 5 máximos goleadores con la azul y oro? Aquí los repasamos. 1. Martín Palermo: El Titán de Boca No es una sorpresa que Martín Palermo ocupe el primer lugar entre los máximos goleadores de la historia de Boca Juniors. Con 236 goles en 404 partidos oficiales, Palermo no solo es el goleador más destacado de la historia de Boca, sino también uno de los jugadores más queridos por la hinchada. Su oportunismo para marcar en los momentos más importantes, su personalidad resiliente y las incontables alegrías que le ha dado a los hinchas lo han transformado en un verdadero ícono. Llegó a Boca desde Estudiantes en 1997 y rápidamente demostró su talento dentro del área. Autor de un gol en la final de la Copa Libertadores del 2000 y de los dos inolvidables tantos contra Real Madrid en la Intercontinental de ese mismo año, también se distinguió por gritar seguido contra River. Tras su experiencia europea, regresó a Boca en 2004 solo para seguir agigantando su leyenda. En 2011 tomó la decisión de colgar los botines y una Bombonera repleta le agradeció por todo lo que le dio al club en un merecido partido homenaje. 2. Roberto Cherro: El goleador de la era amateur Hasta la aparición de Palermo, el máximo goleador en la historia de Boca y el que más tiempo llevó esa condecoración. Cherro ocupa el segundo lugar con 223 goles en 301 partidos oficiales. Toto, como se lo conocía, fue parte de una de las primeras grandes generaciones xeneizes, una que se destacó en la era amateur y que sentó las bases de los grandes logros del club en la era profesional. Apodado “Cabecita de Oro” por su destreza para el cabezazo, no solo era un goleador prolífico, sino también un líder en el campo de juego. Uno de los goles más importantes de su carrera fue el que le anotó a Independiente en 1938, lo que significó una victoria crucial para el equipo en el torneo local. También fue parte fundamental en la obtención de la Copa de Honor 1935 y varias ligas locales. Su legado, aunque no tan reconocido como el de otras figuras más recientes, fue crucial en el inicio del profesionalismo. 3. Francisco Varallo: El primer gran goleador profesional Con 194 goles en 222 partidos oficiales, Francisco Varallo ocupa el tercer puesto en esta lista. Varallo jugó en Boca Juniors entre 1931 y 1940 y fue un pionero en la era profesional del fútbol argentino. “Pancho” fue el primer jugador de Boca en superar los 100 goles en el fútbol profesional. Uno de sus tantos más recordados fue el que le anotó a San Lorenzo en 1934, en un partido que le dio al club el campeonato de Primera División. Los 45 goles que gritó a lo largo de 1933 se mantienen al día de hoy como el récord de tantos convertidos en un solo año calendario. Varallo no solo fue un goleador, sino también un verdadero símbolo de la época dorada del club y un referente para los hinchas. 4. Domingo Tarasconi: El goleador de la era dorada Este rosarino nacido en 1903 llegó desde Atlanta en 1922 para comenzar a escribir su historia en Boca. Puntero derecho devenido en centrodelantero, “Tarasca” se destacaba por un potente remate de media distancia. Fue el símbolo de Boca a lo largo de la década de los ‘20 y en su etapa xeneize supo levantar 10 títulos, entre ellos cinco campeonatos de liga. Su extraordinario nivel lo llevó a representar al país en los Juegos Olímpicos de Ámsterdam 1928, donde como no podía ser de otra manera, también fue goleador. 5. Jaime Sarlanga: Elegancia y eficiencia en el área Jaime Sarlanga, quien jugó en Boca entre 1940 y 1949, ocupa el quinto puesto con 129 goles en 220 partidos oficiales. El abuelo del empresario Juan Pablo Sarlanga se destacó por su habilidad para marcar goles, su capacidad para moverse con rapidez en el área y su gran técnica. Proveniente de Ferro, rápidamente se adaptó al estilo de juego de Boca y comenzó a ser fundamental en la delantera del equipo. Fue parte de la exitosa delantera de oro de los años 40, una que se destacó por su extraordinario poder de gol y que llevó al club a conseguir una gran cantidad de títulos. El 6 de abril de 1941 tuvo lugar un hecho destacado en su carrera y en la historia de Boca al marcar seis de los siete goles que Boca le propinó a Atlanta en un 7-2. Al día de hoy, níngun otro jugador xeneize pudo igualar ese registro. Durante su tiempo en Boca fue mucho más que un goleador. “Piraña”, como lo solían llamar, fue también un líder dentro del campo y la figura en la obtención del histórico campeonato de 1944. Su estilo de juego elegante y efectivo lo convirtió en uno de los grandes ídolos del club. En 1949 partió hacia Gimnasia de La Plata habiendo conseguido 8 títulos con la azul y oro puesta.